viernes, 27 de marzo de 2009

GATTACA

GATTACA es una de mis películas favoritas. Dije que algún día daré la lista de mis películas favoritas, pero obviamente una gran parte de ellas pasará por aqui, por diferentes motivos. Muchas de mis películas favoritas tienen escenas que me parecen brillantes, terribles o las dos a la vez.
El ser humano siempre ha discriminado, hay discriminación contra los negros (en algunos lugares del mundo más que en otros, en Venezuela no es muy marcada), hay discriminación contra los judios (que lo dijera Hitler), hay discriminación contra los pobres y en Venezuela hay discriminación contra los ricos. Hay discriminación contra los delgados y contra los gordos, contra los bellos y contra los feos, contra los gay y contra las lesbianas. Hay bastante discriminación. Lo que sucede es que la discriminación no está institucionalizada, por lo menos no desde hace mucho tiempo en muchos países del mundo.
GATTACA (experimento genético, como se llamó en español) habla de un futuro próximo, donde la discriminación será institucionalizada y se hará por el código genético. Si alguien pudiera ver tu código genético, realmente estarías desnudo y vulnerable, serías transparente para quien te contrata o te quiere. Esa es la historia en esta película: las empresas solo contratan a gente de genes superiores ya que esto garantiza inteligencia superior, resistencia física superior, personalidad menos conflictiva, capacidad para resolver problemas, y miles de millones de cosas que pueden esperarse de personas que sean construidas, fecundadas a través de métodos artificiales. Y es allí donde está el meollo de la cuestión: el protagonista fue concebido a través del método natural, sin intervención científica. A pesar de que aún hay gente que en este futuro distante nace sin ser resultado de fecundación in vitro, es difícil realizar los sueños, trabajar, alcanzar las metas, cuando toda la sociedad está hecha para favorecer a los que tengan las mejores características.
Vincent (interpretado por Ethan Hawke, ya hablé de él en “La sociedad de los poetas muertos”) es un in-válido, creado naturalmente, y desea convertirse en astronauta. Nació con problemas cardíacos (ya que sus genes fueron estudiados al nacer) y le determinaron que viviría hasta la temprana adolescencia. Pero Vincent ya es adulto, ya se fue de su casa, y quiere alcanzar sus metas. Para ello, hace fraude, impersonando a un nadador olímpico superior genéticamente, pero que ha quedado minusválido por un accidente de tránsito. Como se hace este fraude? eso es un problema, cuando tu cédula de identidad es tu Código genético. Vincent tiene que quitarse todas las células muertas de su piel todos los días, usar burbujas dentro de su piel que contienen la sangre superior de Jerome, tomar cabellos de Jerome y dejarlos junto con otras células epiteliales en su zona de trabajo, usar lentes de contacto de otro color, cambiar su estatura, usar recipientes de orina especiales. Y en algunos casos, tiene que tomar inclusive grabaciones de los latidos del corazón. Queriendo Vincent ser astronauta, tendrá que hacer entrenamiento físico, y para las pruebas usa un monitor cardíaco hackeado, donde ha grabado los latidos del corazón de Jerome. Vincent se ha convertido en Jerome, pero solo por fuera.
La escena que verán a continuación muestra la voluntad, el deseo de superarse, la determinación y la fortaleza de Vincent intentando convertirse en Jerome Eugene. Está entrenando en una trotadora, pero su corazón es débil. La escena parece basarse en la investigación policíaca de la trama de la película, pero recuerden que Vincent tiene problemas cardíacos. Es una escenas desgarradoramente intensa, porque Vincent está ahogándose en esta escena y tiene que fingir. No puede respirar, prácticamente, mientras trota, sin mostrar casi expresiones.
Ethan Hawke es uno de mis actores favoritos, junto con Jude Law, que hace el papel de Jerome Eugene, el nadador lisiado que le ha dado su “cuerpo” a Vincent. Además actúa Uma Thurman, una actriz brillante y hermosa.
El tema de la película, y su desenlace, son brillantes. La recomiendo completamente. Es una de las mejores películas que he visto, y la sigo viendo. Y soñando con las estrellas.


 


 

Little Miss Sunshine

Cuando presentaron las nominaciones al Oscar del año 2007, no sabía quien iba a ganar entre Little Miss Sunshine y The Departed (los infiltrados en español). Simplemente las dos películas eran muy diferentes, y ésta en particular era realmente brillante. Recuerdo que tuve una discusión con un amigo por el tema de esta película, ya que él dijo que era demasiado mala, aburrida y la comparó con “vacaciones” de Chevy Chase, y de allí tomé la frase de “todo el mundo tiene derecho a equivocarse sobre lo que le dé la gana”. Si yo quisiera decir que el equipo de Futbol de Brasil es mejor que el de Italia porque la camisa de los de Brasil es verde(como la esperanza) y además son latinoamericanos como yo, yo estaría muy equivocado (probablemente estaría en lo cierto, pero por motivos equivocados). Ese era el argumento de mi amigo para decir que la película era mala, simplemente porque a él le parecía que era mala. Luego de ese día aprendí que todo el mundo puede opinar de cine, pero no todo el mundo sabe opinar de cine (lo mismo pasa con los deportes, la política, y casi cualquier aspecto de la vida).

Little Miss Sunshine es una comedia con mil millones de matices. Una comedia que intenta mostrar que las esperanzas y las expectativas de las personas no siempre están en sincronía con sus habilidades, y que la mayoría de nosotros no conocemos nuestras debilidades. Sin embargo, la intención no es que la gente se rinda sin intentarlo, puesto que además de las habilidades es necesaria la voluntad.

Little Miss Sunshine trata de un concurso de belleza infantil. Abigail Breslin, en su actuación, hizo magia interpretando a una niña rechoncha, inocente, deseando ganar el concurso de belleza en cuestión. Para ello, la familia tiene que viajar con ella por todo Estados Unidos, en una camioneta con el arranque dañado, con un abuelo adicto a la heroína que se muere en el transcurso del viaje (y que luego hay que llevarlo muerto en la maletera de la camioneta) un hijo adolescente que se niega a hablar hasta obtener permiso para entrar a la aviación (y en el devenir de los eventos se entera que es daltónico, por lo cual no es apto para la aviación militar) un tío homosexual suicida experto en literatura inglesa, un padre que creó los pasos para el logro y realización personal pero no logra vender su idea (lo cual lo hace un fracasado) y la madre que intenta mantener a todos juntos.

La escena del final? la niña regordeta haciendo un baile que su abuelo le coreografió. Ella no sabía lo que su abuelo (su tierno abuelo) quería conseguir con esa coreografía, y simplemente la bailó siendo inocente a todo, pero su baile busca remover las emociones y los paradigmas de las mentes cerradas. Es una rutina muy cómica por lo irreverente. Cuando la ví por primera vez, yo estaba sin palabras, exageradamente sorprendido. Luego empecé a reir, empecé a reir sin parar, porque simplemente la irreverencia de la escena logró hacer su efecto en mi…

Esta película, tan diferente a los infiltrados, también se merecía el Oscar de mejor película.

Superfreak, superfreak!



La sociedad de los poetas muertos

Vi la sociedad de los poetas muertos en televisión, cuando tenía 12 años, unos cuantos años luego de su estreno en 1989. Yo vivía en caracas, y la televisión nacional, en semana santa, tiene la tendencia de pasar películas largas y repetidas. Ese año pasaron este estreno. Aún no recuerdo el motivo por el cual la grabé en una cinta de VHS mientras veía la película. Recuerdo que le daba pausas a la grabación para no incluir los comerciales, aunque en semana santa casi no pasaban comerciales.
Recuerdo a esta película porque fue, oficialmente, la primera película que vi que, luego de haberla visto, no podia olvidar. No es lo mismo que Alien, esa era de terror y por supuesto que estuve muy asustado mucho tiempo, sino que esta era la primera película de drama que formalmente me hacía pensar. Estuve deprimido un tiempo luego de verla, claro, no esperaba menos de un muchacho de 12 años viendo una película de tal intensidad. Pensaba en la película todo el tiempo.
La narración de esta película es muy clásica y convencional, pero tiene un elemento interesante: luego del suicidio del protagonista de la historia (Robert Sean Leonard, ahora lo pueden ver en el papel de Wilson de la brillante serie de televisión HOUSE M.D.), la atención pasa al papel medianamente irrelevante de Ethan Hawke, para hacerlo mucho más rico, y Hawke pudo resistir en sus hombros la presión de darle culminación a la historia. Por supuesto que está Robin Williams, que obviamente hizo una actuación impecable, pero siendo esta película la historia de unos adolescentes en una escuela represiva, la relevancia de Hawke se hace evidente al guiar la rebeldía de la escena que están por ver.
El profesor Keating, interpretado por Robin Williams, es un constructivista (construye el conocimiento y el aprendizaje) mientras que la escuela es marcadamente conductista (aprendizaje por refuerzos positivos y negativos). Hace 50 años, época donde se ubica la historia, la diferencia entre estas dos teorías de enseñanza eran marcadamente fuertes, y no había mucho lugar para Keating en instituciones de alto renombre. La gente se guiaba por las apariencias y todos juzgaban a escondidas (no quiere decir que la gente no juzgue ahora, solo que entonces había un conjunto de patrones morales muy estrictos) y el suicidio de uno de los estudiantes hace que expulsen a Keating de la Academia. Luego viene esta escena, que aún me produce escalofríos.
Oh capitán, mi capitán!, comienzan a repetir los estudiantes del aula, a medida que se van poniendo de pie sobre los pupitres. Se ponen de pié porque el profesor Keating les dice que, a veces, hay que ver las cosas desde otro punto de vista, y los exhorta a que se suban a los pupitres y puedan ver el mundo desde esta nueva perspectiva. Lo de Oh, capitan, mi capitán!, lo sacaron del nombre de un poema de Walt Whitman, que es un poeta de gran importancia para la lengua inglesa y para la trama de la película (y para la literatura del mundo entero). El profesor Keating no solo les dió clases de literatura, también les enseñó a tener una vida más cercana a sus emociones, más auténtica, más propia. La escena me parece muy intensa. Lamentablemente, tiene un defecto, que no comentaré, pero que es fácil ver cuando uno ha visto la película hasta aprenderse los diálogos, como la vi cuando tenía 12 años.
Oh, Capitán, mi capitán!


Dead Poets Society Excerpt 03 por thenelaware

sábado, 14 de marzo de 2009

Interview with the Vampire

Soy un fan de Lestat de Lioncourt. ¿Sabes quien es Lestat?. Es el protagonista de muchas de las Crónicas Vampíricas, escritas por Anne Rice. Los libros siempre superan a las películas, solo puedo recordar un caso (“Shawshank Redepmtion” conocida en español como “sueños de fuga”) donde tal vez la película sea mejor que el libro. Lestat es uno de los personajes más intensos de todos los vampiros que he leído, romántico, apasionado. Siempre fuí fanático de las historias de Vampiros, leí Drácula a los 15, y ví quien sabe cuantas películas referidas al tema durante toda mi vida.
Entrevista con el vampiro no es más de lo mismo. Ahora pululan historias de vampiros: True Blood, Twilight, inspiradas en la reconstrucción de los vampiros inmortales de Anne Rice. La historia es diferente, ahora los vampiros no son demonios, son simplemente observadores, estrellas que miran el paso del mundo, estáticos, inmutables.
En esta historia, Lestat es el malo. El enemigo, por así decirlo. Es necesario leer “The Vampire Lestat” para entender muchas de las cosas que el mejor de los vampiros hace en “Interview with the Vampire”, ya que en la primera entrega parece despiadado y desalmado. Lamentablemente, no hay una película que le rinda honores al personaje, el comercio y las políticas de Hollywood dañaron los libros y entregaron “The Queen of the Damned” amputada y mal abortada, defectuosa en general, asfixiando a la novela y consumiéndola toda.
Lestat, interpretado por Tom Cruise, es un vampiro rubio y aparentemente desalmado. Louis, su aprendiz, demasiado joven e inexperto, se resiste a ser vampiro, pero es tentado por la sangre con fruición. En esta escena verán a Lestat usar a su víctima humana como el cigarrillo que tienta a quien dejó de fumar, como un objeto inanimado, que solo produce ruidos al chocar con una mesa o caer, una víctima, una presa, un ser sin importancia.
Cuando vi esta escena sentí miedo. No es una escena de miedo, pero me sentí infinitamente inferior. Si yo fuera la víctima, estaría condenado a muerte, y no habría palabras, no habría llanto, que pudiera ayudarme.
Si no sabes nada más de Lestat, créeme, no es el ser despiadado que se muestra en esta escena: todo tiene una explicación.
Tom Cruise afectó mucho el desempeño de esta película, afectó el guión, eligió actores, alejó a la escritora. A pesar de eso, la historia se mantuvo medianamente fiel al libro, y tuvo un resultado que me pareció excelente. Véanla, y lean los libros. Esta escena está tomada casi textualmente del libro, y de veras se muestra en ella los distintos caracteres de los personajes.

viernes, 13 de marzo de 2009

Atonement

Creo que no he visto una película que no admire donde haya trabajado Keira Knightley. No las he visto todas, pero las que he visto han sido sorprendentes, a pesar de que “pirates of the Caribbean: at world´s end” no me agradó tanto como las anteriores. Atonement (llamada en español como Expiación y Pecado) es una de esas historias que muestran como un malentendido inocente y la imprudencia puede destruir la vida de una persona o de varias por completo.
Recuerdo que vi esta película y al inicio no esperaba que la historia se desenvolviera de la manera que finalmente lo hizo. Pensaba que la expiación sería culpa de las acciones propias, y no que una niña celosa tendría en sus manos y en su convicción la fuente de la condenación. Todos cometemos errores, y algunos son tan grandes que no podemos medir las consecuencias. Esta película estuvo nominada al premio de la academia como mejor película, y de verdad tiene lo suyo. La escena que viene a continuación no sucede: es solo la manera de la niña equivocada de resolver, en su mente, todo el enredo que produjo en la vida de los demás. Arruinó la vida de su hermana, y más aún, arruinó la vida del empleado familiar que solamente estaba enamorado. La niña se ha convertido en enfermera, y luego en escritora: es la autora (ficticia) de la historia biográfica que se cuenta.
La historia cuenta la vida de Briony Tallis, una niña de trece años, que desea ser escritora. Está enamorada de Robbie Turner, interpretado por James McAvoy, que desea y ama a la hermana mayor de Briony, Cecilia, interpretada por Keira. Una “violación” en la casa familiar la hace acusar a Robbie de perpetrador, pero porque está obnubilada por tantos eventos que su imaginación ha creado respecto a lo acontecido ese día. Robbie es enviado a la carcel, y la carcel es peor que la Guerra, así que Robbie decide ir a la Guerra para ser perdonado del delito que no cometió. En la historia que Briony cuenta de adulta, ella confiesa que lo que están a punto de ver no sucedió, que fue su manera de pedir perdón ante el cielo y el recuerdo de su hermana y su amante, pero nunca hay suficiente remordimiento para expiar tal pecado.
Lo fascinante de esta escena es que, realidad o ficción dentro de la ficción, es infinitamente romántica. Robbie está perturbado: es un ser que los rigores de la guerra y la cárcel ha dejado sin felicidad. Cecilia es su mujer, que vive cada día con la esperanza de que puede traer a Robbie a un mundo más iluminado y tibio. Briony merece la muerte y el desprecio. Cecilia cree, siente, vive con la esperanza que su amor es suficiente para quitar la fiebre que consume Robbie, para traerlo hacia ella. Es una escena que solo al verla me produce escalofríos. Impecablemente realizada, con emociones que pueden leerse claramente en la cara de los tres personajes. Es terrible comprender, al final que solo es la manera de pedir perdón de Briony, pues ambos murieron en la guerra sin poder ser felices, ambos murieron por un chisme inocente.
Mide tus palabras. Piensa en el impacto de tus acusaciones.
 

martes, 10 de marzo de 2009

Velvet Goldmine

Creo que, por ser zurdo (o por cualquier otro motivo), he tenido desde siempre una sensibilidad especial por las artes. No soy un artista, no toco ningún instrumento, no tomo fotos que expresen emociones encontradas, no escribo canciones, no hago esculturas ni pinto, no diseño edificios; soy un ingeniero, un científico. Pero las artes me han apasionado desde pequeño. Me encanta y siempre me ha encantado leer, me gusta escuchar música clásica, soy apasionado con el cine, aunque desconozco muchos de sus origenes e influencias. Declaro que nunca he visto una película de cine mudo y algunas de las consideradas “grandes” de los inicios del cine no me llaman la atención y por lo tanto no las he visto. Creo que lo que más me ha marcado entonces es lo clásico y lo romántico. Pero tambien declaro que he estado viendo películas (de manera intensiva y con una actitud crítica) desde que tenía 11 años, o tal vez menos. Recuerdo que para la época el estreno del silencio de los inocentes, como era menor de la edad mínima para poder entrar al cine en esa pélicula, comencé a leer todo lo que aparecía en los periódicos y revistas acerca de la película. Luego pedí a mis padres que me regalaran el libro, para poder leer la historia que no pude ver, y así pasé tres años, hasta que un día la pasaron en estreno por televisión. Luego me dí cuenta que muchas de las películas que yo quería ver no llegaban a las salas de cine de Caracas, o por lo menos no a las salas comerciales, y comencé a notar que la gente en general quiere ver películas simples, sin profundidad, que generen emociones tradicionales como el miedo o la risa, y no esperan ver matices profundos en actuaciones o todas las capas de una película.

Velvet Goldmine es una película acerca del Glam Rock en Inglaterra (Reino Unido debería decir) en los años setenta. Está inspirada por un personaje y un caracter creado por David Bowie para si mismo (aún cuando David Bowie no tomó parte en ningún aspecto y hasta vetó la película), y trata de buscar la propia identidad. Es una película con cuatro personajes conflictivos. Brian Slade es el cantante más famoso del glam, una superestrella, y en su último disco interpreta a Maxwell Demon, venido del espacio. En este momento, Slade/Demon está en la cúspide de su carrera y con su imagen más andrógina de su trayectoria. Abiertamente bisexual, se enamora de Curt Wild, su contraparte estadounidense, artista autodestructivo y caótico. La esposa de Slade es desplazada cada vez más por los deseos de fama de éste, y por otro lado, un adolescente buscando su identidad sexual está enamorado de la imagen de Demon, quien contará la historia diez años después a través de una investigación para la agencia de prensa para la que trabaja.

Y ¿que es lo que me gusta de la película?, Todo. Es una película algo bizarra y recargada, un musical de glam rock (que siempre me ha parecido el rock más nostálgico y melancólico de todos) y con actuaciones excelentes. Es una película de bajo presupuesto, con una banda sonora impresionante. Sí, cierto, hay mucha escarcha y plumas y ambiguedad sexual y drogas, pero no esperaba otra cosa de una película basada en parte de la carrera de David Bowie, pero es lo que no se ve lo que me cautiva.

El rol principal, el de Brian Slade y su personaje Maxwell Demon es interpretado por Jonathan Rhys Meyers, a quien he seguido desde hace poco luego de su excelente papel en Match Point de Woody Allen (y quien ahora encarna a Enrique VIII de Inglaterra en la serie “the Tudors”), en un papel que seguramente no lo enriqueció económicamente pero que mostró su versatilidad actoral, al representar a un ser tan ambiguo y amanerado. Curt Wild es interpretado por Ewan McGregor, que seguro recuerdan de “Star Wars” en sus tres nuevos episodios, y el reportero que una vez fue adolescente (fan enamorado de Brian Slade y realizándose sexualmente con Curt Wild) es interpretado por Christian Bale, ahora mejor conocido como BATMAN. Toni Collette interpreta a la esposa de Brian, atormentada por la fama creciente de su esposo, y a quien seguro vieron en “Little Miss Sunshine”. Cuando veo a actores como estos interpretando papeles de sexualidad ambigua siempre recuerdo como Tom Cruise obligó a los guionistas de Entrevista con el Vampiro a modificar las escenas, diálogos y al guión en general para no parecer gay en su interpretación de Lestat. Cruise, tienes mucho que aprender, alli tienes a Obi Wan, a Bruce Wayne y a Enrique Octavo de Inglaterra dándose besos y desnudándose, todo sea por contar una historia.

La escena a continuación me parece un resumen de las miles de facetas que puede tomar Jonathan Rhys Meyers en su interpretación de David Bowie a la manera del director Todd Haynes, con una canción que me parece excelente. Se llama “the ballad of Maxwell Demon” y en la película intenta explicar el ascenso de Brian Slade a la fama y su vida de excesos.

Busquen Velvet Goldmine y véanla. No espero que les guste, espero que sientan emociones diferentes.